Adrián Lagar, presidente de Acgema, con uno de sus caballos / Mario Rojas
Adrián Lagar. Presidente de la Asociación de Criadores de Hispano Bretón de la Montaña
MARÍA JARDÓN
El mercado de Pola de Siero acogió la semana pasada el VIII Concurso Regional de Ganado Equino de la Montaña Asturiana, una cita que fue un éxito de afluencia y a la que se presentaron más de setenta ganaderos. Sobre ello y la situación de esta raza charla con EL COMERCIO Adrián Lagar, presidente de la Asociación de Criadores de Hispano Bretón de la Montaña (Acgema).
-¿Qué valoración hace del concurso?
-La valoración para la asociación es muy positiva. Lo que buscamos es dar a conocer y mostrar tanto la calidad como el tipo de ganado que tenemos en Asturias en equino de carne, y la asistencia ha sido más que significativa. Un éxito de público y de animales, estaban muy bien preparados. Los ganaderos cada vez miman más su ganado y eso se nota en los potros que tenemos en Asturias.
-¿Cuántos caballos participaron en esta ocasión?
-Para esta edición estaban apuntados 183 animales de 71 ganaderías.
-Siguen peleando para que se reconozca la raza…
-Sí, en 2015 comenzamos la tramitación para tener lo mismo que tienen otras comunidades, que es su propia catalogación de su equino de carne. Llevamos tiempo en trámites con el ministerio, pero de momento no lo hemos logrado. Al final, uno de nuestros objetivos como asociación es que los ganaderos de Asturias tengan los mismos privilegios y derechos que tienen otras comunidades. Por ejemplo, el resto de ganaderos del norte de España de equino de carne.
-¿A qué privilegios se refiere?
-Por un lado, el elemento de gestión para poder ir mejorando la raza de distribución cárnica; por otro, desde las ayudas de la sequía hasta las subvenciones o ayudas al ganadero por yegua de más de tres años. Eso que otras comunidades sí tienen. ¿Por qué el ganadero de Asturias va a ser menos que el de Castilla y León, de Cantabria, de Aragón…? De cualquiera de las comunidades que tienen equino de carne.
-¿Cuántos socios forman parte de la asociación?
-Ahora mismo somos 1.030 socios, más porque tras el concurso hubo 15 nuevas altas. Engloba una parte pequeña del potencial que hay en Asturias, pero somos la asociación más numerosa que en ninguna otra comunidad. Siendo donde más equino de carne y ganaderos hay, es una de las razones para seguir luchando para no ser menos que otros.
-¿A qué precio está el kilo de carne?
-El consumo nacional es prácticamente inexistente y lo que hacemos desde hace un par de años, es comercializar con los cebaderos para quitar intermediarios y marcar el precio que no estaba en ningún sitio. Desde la asociación estamos haciendo de lonja y realizamos una venta conjunta, el 15 de junio tenemos una. Notificamos a los socios que estén interesados en vender alguno de sus animales, los juntamos, los pesamos y cada animal se pagará al precio que vale. Ahora mismo los potros están a 280 euros el kilo así que tendrán que multiplicar su peso por esa cifra, y a los cuatro días el ganadero cobra. Es un acuerdo que está saliendo muy bien, ha posicionado los precios y le ha dado estabilidad.
-¿A qué mercados se dirigen como colectivo?
-Mayoritariamente, a Italia y Suiza, pero cada vez hay más mercados nuevos que estamos captando. Por ejemplo, el mercado japonés, que es consumidor de equino. La realidad es que toda la producción que tenemos en Asturias y en el norte de España está vendida. Hay una demanda internacional muy fuerte, no es tanto la nacional, que sí se consume algo en el Mediterráneo, pero, prácticamente, más del 95% de nuestros animales se van fuera de España.
-¿Cuántos caballos hay?
-Ahora mismo, medidos y que tengamos un trabajo previo para cuando consigamos avanzar en la raza, son unos 2.500, pero el potencial es mucho mayor. En Asturias habrá fechadas más de 15.000 yeguas de ese tipo. Es que el sector está en auge y el objetivo es que continúe. Defender un poco algo que está bastante olvidado, porque sin tener ningún tipo de ayudas está teniendo beneficios, es productivo y por eso la gente está apostando por ello.
-¿Qué los caracteriza?
-Todas las razas de equino de carne comparten un mismo origen genético. El asturiano, como está en alta montaña, es un caballo más pequeño, más cercano a tierra, muy robusto, de pata no muy larga, un tonel de carne porque tiene partida la culera, de cabeza pequeña y cuello muy robusto.
-¿A qué retos se enfrentan?
-Uno de los mayores ‘hándicaps’ que tenemos es el lobo. La mayoría de animales en Asturias se crían en ganadería extensiva y el mayor problema que tenemos a día de hoy para poder decirle al ganadero que apueste por esto son los ataques de animales salvajes. Es un tema que está descontrolado completamente y nos preocupa mucho porque en 8 o 10 años no podremos soltar un animal en las montañas, donde están ahora.