El nuevo fertilizante  de Delagro que se usa en hierba, e incluso   en maíz para ciclos cortos, permite ver en un mes  efectos positivos sobre las plantas

Lograr el máximo potencial de nuestras praderas es fácil y posible si usamos los fertilizantes adecuados.

Gracias a su alianza con Yara, el mayor fabricante de fertilizantes del mundo, el distribuidor Delagro pone a disposición de los ganaderos una amplia gama de soluciones de nutrición vegetal que cubren todas sus necesidades. Una de ellas es YaraMila Actyva.

YaraMila ACTYVA es un fertilizante complejo de alto contenido en nitrógeno fabricado en base al método de Nitrofosforación y que aporta nitrógeno, fósforo y potasio totalmente asimilables. Su presentación en forma perlada lo hace adecuado como abonado de inicio del cultivo.

Desde un punto de vista técnico, ACTYVA es un referente en NPK, sobre todo para usar en hierba; incluso recomendable para un uso en maíz para ciclos cortos combinado con Yara Amidas en cobertera. Al ser un fertilizante complejo, cuyos  nutrientes se encuentran en igual proporción en cada perla o gránulo, se asegura una aportación homogénea en cada uno de ellos.

Efectos positivos sobre las plantas en un mes

ACTYVA contiene dos formas de nitrógeno (nítrico y amoniacal) que hace que esté  disponible para la planta tanto de forma inmediata como a largo plazo. Esto asegura un aporte de nutrientes continuo a la planta.

Entre sus características, explican, destaca su fósforo de alta solubilidad, que permite ver en poco más de un mes efectos positivos sobre las plantas, incluso en terrenos muy abonados.

“El fertilizante YaraMila Actyva consigue un ahijado y cuajado que con otros productos es muy difícil de conseguir”, sostiene Daniel Baizán, Produt Manager de Delagro. Esta alta solubilidad de fósforo es consecuencia del extraordinario desarrollo tecnológico que ha hecho Yara con la tecnología P-Extend que aporta, además, un pequeño contenido en magnesio y azufre.

El hecho de funcionar a bajas dosis hace que sea un producto mucho más eficiente que otros fertilizantes, “especialmente válido para ganaderos que van a dos cortes o que trabajan con praderas permanentes. Se consigue muy buen ahijado, muy buena hoja, con dosis de unos 300 kg aproximadamente por hectárea”.

Esto nos permite dejar el terreno con unas condiciones de abonado perfectas para un segundo corte o incluso para empezar el maíz. En segundos cortes la dosis sería un poco más alta.

El encalado es un elemento fundamental para que el fertilizante haga su efecto. “Gracias a productos como YaraMila Actyva, que contiene en su formulación Azufre, logramos que los cationes de la tierra se muevan a capas más profundas, logrando así mayor raíz, sobre todo en maíz, arrastramos aluminios hacia el fondo por lo que logramos un mayor desarrollo radicular”, comenta Baizán.

Con YaraMila Actyva, Delagro se sitúa a la vanguardia de la nutrición vegetal, con un catálogo de productos que cubren todas necesidades de los ganaderos de la cornisa cantábrica. Usar abonos de alto valor añadido ayuda a optimizar el uso de los fertilizantes, así como a mejorar las producciones al mismo tiempo que se optimizan los costes de abonado debido al uso de menores dosis. Esto repercute directa y de forma positiva en el medio ambiente.