El Consejo Regulador de la IGP Ternera Asturiana sitúa a la ganadera ovetense Isabel de la Busta como relevo de Rubén Fernández al frente de la marca

LUCÍA LÓPEZ PÉREZ

La ganadera Isabel de la Busta fue elegida ayer nueva presidenta del Consejo Regulador de la IGP Ternera Asturiana, en sustitución a Rubén Fernández, el anterior presidente que, «por motivos de salud», tuvo que cesar del cargo recientemente. La ganadera ovetense lo hizo por unanimidad, durante la reunión del pleno del Consejo Regulador que se celebró en Pola de Siero.

Durante el mandato de Rubén Fernández como presidente del Consejo Regulador de Ternera Asturiana, cargo para el que fue reelegido hace dos años, De la Busta ya formaba parte del equipo de gobierno como vocal. Ahora asume un cargo que la hará estar «más implicada» que entonces y al que «aún tengo que adaptarme poco a poco al cambio». No obstante, y a pesar de las nuevas competencias que deberá asumir, Isabel de la Busta acepta el cargo de presidenta «consciente de la responsabilidad que implica» e «ilusionada por intentar contribuir al futuro del sector». Un futuro con grandes retos a afrontar, especialmente relacionados con la promoción de una marca especialmente relevante en el sector agroalimentario asturiano.

Ante estos retos, la nueva presidenta asegura que los objetivos en su mandato «serán los mismos que tenía el antiguo presidente», continuando así con la labor de Rubén Fernández de promoción de la marca, cuyo «compromiso con la producción sostenible y responsable es nuestra principal fortaleza». Entre los planes más cercanos para promocionar la marca se encuentra «el Salón ‘Gourmet’ de Madrid, que se celebrará en abril y en el que estaremos dando valor a la Ternera Asturiana», pues la nueva presidenta estima que la hostelería es un aliado estratégico para fomentar el consumo de la marca.

Una situación desfavorable

De la Busta llega a la presidencia del Consejo Regulador de la IGP conociendo que «la situación actual para los ganaderos no es favorable», debido, especialmente, al alto coste de los piensos y la escasez, cada vez mayor, de materias primas para alimentar y mantener al ganado. Esta situación «complicada» la ha llevado a hacer un balance del que concluye que «el problema principal que se nos presenta a los ganaderos hoy día es el coste de las materias primas». Y añade que «actualmente es complicado tener animales y poder mantenerlos porque es algo que requiere de muchos números».

Unos números que no siempre salen. Ella lo sabe bien, ya que  desde 1989 «llevo criando la raza asturiana de los valles», lo que la llevó, posteriormente, a ser secretaria de la Junta de Gobierno en funciones de Aseava. En toda su trayectoria no se había visto nunca tan sorprendida como ahora por «el precio de los piensos» que asegura que «está carísimo», al igual que todo lo demás que «está por las nubes» a causa de la guerra de Ucrania, que ha encarecido no solo los productos esenciales, sino también la luz y el transporte, «indispensable» para el ganado.

Su conocimiento de primera mano del sector ganadero es lo que marcará su propósito principal en los dos años que estará al frente del consejo regulador de la IGP, que no es otro que «mirar siempre por el sector ganadero e intentar apoyarlo en todo lo que esté de mi mano».

Respecto al futuro del sector ganadero, De la Busta no se muestra tan segura y no se atreve a vaticinar cómo será ya que «es complicado» vista la situación actual que atraviesa. Pese a ello, la nueva presidenta de la IGP Ternera Asturiana prefiere mantenerse a la espera «que las cosas mejoren». Aunque no sabe «cuánto tiempo tendrá que pasar para que lo hagan», se mantiene optimista. No obstante, para fomentar este cambio y un mayor impulso de la marca, De la Busta no duda en instar a los consumidores a que consuman esta marca que integra a 6.200 ganaderos ya que «las ganaderías familiares necesitamos que el consumidor nos apoye, consumiendo Ternera Asturiana».