Alejandro Calvo y Begoña López departen con Mamen Oliván (Serida) en la feria Sidra de Asturias/ J. M. Pardo
Medio Rural tiene ya «un borrador de Ley de Ordenación Integral del Territorio» que «espero que se pueda tramitar cuanto antes, al inicio de la legislatura»
O. VILLA
Menos de 24 horas tardó el consejero de Medio Rural, Alejandro Calvo, en aceptar el guante lanzado el pasado lunes en Tineo por el nuevo gerente de la Red Asturiana de desarrollo rural (Reader), Juan Antonio Lázaro, que proponía hacer del Banco de Tierras del Principado un instrumento más rápido y con una capacidad de asesoramiento más intensa, para lo que «el Banco de Tierras podría tener una delegación territorial perfecta, los once grupos de Desarrollo Rural» que componen la red asturiana.
Además de reactivar terrenos sin uso, se trataría de zonificar los terrenos agrarios. Lázaro pidió para ello «mapas agroclimáticos regionales y de calidad agronómica de los suelos, con detalle a la parcela», para optimizar sus usos, así como «una Ley de Protección de los Suelos de Alto Valor Agrológico o de la Superficie Agraria Útil».
Calvo indicó que la propuesta de Lázaro no sólo «no es una ocurrencia», sino que «es algo sobre lo que hemos trabajado». Según precisó, los grupos de desarrollo rural «están trabajando con los proyectos del plan Leaderando que se presentó en Soto del Barco».
De este documento de trabajo, que se complementará con las nuevas estrategias de desarrollo rural que tienen que aprobarse antes del final del próximo mes de agosto, en las que están trabajando tanto los grupos de desarrollo rural como la consejería en un proceso abierto a la colaboración de los emprendedores rurales, Alejandro Calvo subrayó ayer que «es un trabajo muy bien pensado para aprovechar las nuevas estrategias de la PAC y para construir de abajo a arriba, pero hacen falta instrumentos, documentos de análisis, y eso es lo que se presentó hace un mes» en Soto del Barco.
El consejero anota que «preservar nuestro suelo agrícola no ha sido un problema hasta ahora, pero podría llegar a serlo»
De hecho, el consejero tiene claro que la red de desarrollo rural está muy pegada a los retos que en cada uno de sus once grupos tienen los emprendedores rurales, las necesidades concretas y las opciones que se abren en cada territorio: «Hay retos que desde Reader conocen bien, por ejemplo lo que tiene que ver con la necesidad de suelo agrícola, como ha pasado en el Bajo Nalón», donde fue durante dos décadas gerente del grupo de desarrollo rural el nuevo gerente de la red a nivel regional. El riesgo, según el consejero, es que se puedan dar situaciones en las que se llegue a «no tener disponibilidad de suelos. Es un factor que puede frenar el crecimiento de la expansión que estamos teniendo en agricultura y por lo tanto ahí todos los instrumentos pueden ser útiles».
En todo caso, precisó Alejandro Calvo que «el Banco de Tierras es una estructura regulada por ley, muy encorsetada, pero donde nosotros estamos totalmente a favor de dar participación al Leader como instrumento de participación local y de desarrollo local», de forma que, insistió, «no es que lo recibamos de una u otra forma, sino que trabajamos en conjunto en ese sentido».
Zonificar y ley de protección
También se pide desde Reader disponer de una zonificación agronómica de todos los terrenos agrícolas y ganaderos de Asturias, de forma que se pueda orientar a los profesionales del campo hacia los usos posibles más rentables y apropiados de cada parcela. En este sentido, Calvo explicó ayer que «tenemos y hemos tenido instrumentos como la concentración parcelaria, que sobre todo para el desarrollo de la ganadería fueron casi suficientes y siguen avanzando, y en ese sentido ahora lo que tenemos es que trabajar en el marco de la ordenación del territorio, para preservar nuestro suelo agrícola, que es algo que en Asturias no ha sido un problema hasta ahora, no ha habido una competencia por el suelo agrícola, pero podríamos llegar a tenerla».
Como ejemplo, el consejero anotó que «hay cultivos como el kiwi, la faba o las pomaradas que van a necesitar suelo y hay que anticiparse a que haya esa disponibilidad».
Respecto a la ley de protección de suelos agrarios que reclama el gerente de Reader, Calvo quiso introducir la precisión de que «eso tiene una legislación. Está dentro del marco de la Ley de Ordenación Integral del Territorio. Hemos hecho un trabajo global. De lo que se trata es de que cada uso sea el más adecuado a la utilidad de cada terreno».
Y añadió que «tenemos un borrador completo de Ley de Ordenación Integral del Territorio que recoge estos aspectos y que esperamos que se pueda tramitar cuanto antes, al inicio de la legislatura».
En todo caso, fuentes de la consejería insistieron ayer que, más allá del Banco de Tierras, también es necesario profundizar en el banco de explotaciones y disponer de exenciones fiscales y otros beneficios, así como seguridades para los dueños de las fincas y parcelas que gestione el Banco de Tierras de que sus derechos de propiedad se mantendrán íntegramente.
La situación del Banco de Tierras en el Principado se complicó cuando, mediada la legislatura, su responsable, Rocío Huerta, tuvo que hacerse cargo de la Dirección General de Ganadería sin que se habilitase un relevo.