La cooperativa de segundo grado asturiana Delagro cuenta en su cartera con un producto que la sitúa a la vanguardia de los futuros requerimientos normativos europeos, en la línea de las nuevas exigencias medioambientales de las ayudas de la PAC
Entrevistamos a Daniel Baizán, técnico comercial de Delagro, que, tras un primer año en el mercado, valora la acogida que el producto ha tenido entre los ganaderos y agricultores Asturianos
– ¿Qué diferencias existen entre un fertilizante bioestimulante como Blue Star frente a los fertilizantes tradicionales?
– Las principales diferencias entre BlueStar y un fertilizante tradicional radican en la incorporación, a lo largo de su proceso de fabricación, de la CONTRIBUTE TECHNOLOGY de Alltech que nos permite, además de intervenir en el proceso de nutrición de la planta, intervenir en la microbiota del suelo sobre el que lo aplicamos, generando un escenario muy positivo en el mismo para la proliferación de microorganismos y las poblaciones microbianas del suelo.
BlueStar incrementa la disponibilidad del Nitrógeno a lo largo de un gran periodo de vida del cultivo. Es capaz, a su vez, de generar enzima fosfatasa, que solubiliza el fósforo presente en el suelo, facilitando su absorción por parte de la planta.
Por último, indicar un aspecto que nos parece claramente diferenciador: la utilización de BlueStar reduce la exposición de nuestro cultivo al estrés abiótico, que es el derivado de aquellos factores que podemos definir como externos, es decir, la temperatura y la exposición a las inclemencias meteorológicas y sus consecuencias. Por ello, deducimos que el uso de BlueStar incrementa la eficiencia y aprovechamiento de los recursos hídricos disponibles por parte de la planta.
– Contando DELAGRO con un catálogo muy amplio de fertilizantes, ¿por qué razón decidió apostar por Blue Star hasta convertirlo en un súper ventas?
-Fundamentalmente porque hemos conseguido un producto que, tras las pertinentes pruebas y ensayos llevados a cabo a lo largo de toda la Cornisa Cantábrica, estimula el desarrollo y crecimiento vegetativo de diferentes tipos de cultivo, promoviendo una mayor potencia radicular, aspecto clave y diferenciador a la hora de apostar por esta nueva generación de nutrición vegetal.
-¿Cómo han recibido los ganaderos la llegada al mercado de un producto como Blue Star? Aquellos que ya lo han probado, ¿qué mejoras han percibido en sus cultivos de maíz?
– La receptividad acerca de la propuesta BlueStar entre los ganaderos ha sido fabulosa. Desde el primer momento, el hecho de contar en su desarrollo y acabado final con la participación de un líder mundial como Alltech y su TECNOLOGÍA CONTRIBUTE, ha sido un factor determinante. Si a esto, unimos la calidad de fabricación y producto de Delagro, así como el conocimiento que ya poseían de nuestra línea de fertilización tradicional en el mercado, cuando les planteamos las fortalezas y características de BlueStar, no dudaron ni un instante en apostar claramente por sus cualidades.
Respecto a la mejora percibida tras su uso, nos gustaría destacar el vigor de arranque de cultivo que nuestros clientes confirman respecto a otras campañas. En este sentido, hay que resaltar la gran solubilidad y disposición inmediata, por parte de la planta, de todos los nutrientes aportados por BlueStar.
Añadir, a su vez, que la aportación de la TECNOLOGÍA CONTRIBUTE nos va a permitir establecer las condiciones idóneas de suelo a medio/largo plazo, por lo que los resultados de la aplicación de BlueStar se van a prolongar en el tiempo, a medida que los distintos microorganismos aportados vayan realizando su peculiar trabajo.
– ¿De qué manera debe aplicarse el fertilizante en los cultivos de maíz?
-Distinguimos dos fases diferenciadas. Previa a la aplicación de BlueStar, deberemos realizar un laboreo que prepare, de la manera más idónea posible, un lecho de siembra perfectamente trabajado. Sobre el mismo, aplicaremos un abonado de fondo con la dosificación recomendada por nuestros técnicos. Dicha dosificación trataremos de que sea lo más específica posible en función de diversos parámetros, además de tener en cuenta la carga de purín aportada previamente (si la hubiera) a la parcela. Al hilo de lo que estamos comentando aprovecho para, tal y como indicamos con anterioridad, invitar a nuestros ganaderos y agricultores a conocer Ferplan, la nueva herramienta de planificación de Nutrición Vegetal de Delagro, con la que conseguiremos dotar a nuestro suelo y parcelas de la dosificación adecuada a sus necesidades, teniendo en cuenta distintos parámetros de manejo, aportaciones previas e incluso, características de su granja e instalaciones.
El abonado de fondo con BlueStar puede realizarse a boleo ó bien, con dosificación en hilera, en la propia sembradora y a la par de la introducción de la semilla en el suelo, teniendo la precaución de calibrar la colocación de BlueStar con unos centímetros de separación respecto a la semilla.
– ¿En qué medida Blue Star contribuye al cumplimiento de las nuevas normativas medioambientales?
-El papel que juega BlueStar en este planteamiento de futuro es esperanzador: gracias a lo avanzado de su diseño y tecnología, es capaz de mejorar la eficiencia de las plantas integrantes de un cultivo, en este caso maíz, a la hora de captar y aprovechar los distintos nutrientes disponibles en el suelo.
Por ello, BlueStar con TECNOLOGÍA CONTRIBUTE lidera el camino hacia una agricultura más sostenible, capaz de reducir la huella de carbono y las desviaciones de fertilizantes al medioambiente, gracias a su capacidad para generar auxinas, estimulando la nodulación y aumentando la absorción de nutrientes vía radicular.
BlueStar constituye, por tanto, una solución fertilizante que va en la línea con las nuevas exigencias medioambientales de las ayudas de la PAC. Tal y como comentábamos al inicio de esta conversación, nos encontramos ante la Nutrición Vegetal del futuro.